jueves, 19 de noviembre de 2009

Meo....fuera de tiesto. (parte 1 de 3)



  Ha pasado, de manera frecuente, que personas tanto en la calle como cercanos, me comenten sobre las virtudes del candidato Marco Enriquez Ominami (Meo, desde este momento), esgrimiendo razones para votar por él, en las próximas elecciones, como si de una choreza o verdadera expresión de cambio se tratase....el problema radica en cuanto me pregunta que opino.
  Es común a toda sociedad "civilizada", el cuestionar sus razones políticas, religiosas y morales, como parte integral de cada espacio que vamos ganando. También es cierto que todo individuo racionalmente posee una opinión al respecto de lo que vé en su vida, y desarrolla como parte de su entorno (siendo de este modo, es que existe este blog y un cuanto hay en la red, porque es válido); aprendemos de las experiencias propias, ajenas, tangenciales, básicas, un largo ect que suele complementar nuestros días y noches. En resumen,vamos viviendo y alimentando nuestra mente y alma de experiencias. Todo ello, a título de las diversas declaraciones de Meo, sobre sus condiciones intelectuales y prácticas, y las razones por las que "usted debe votar por él". Lo intrigante del asunto, es que varias de estas razones son cuestionables, no solo por un tema político, sino más bien de sentido común.
  Cuando un jefe de campaña señala que su candidato es inteligente por "leer 200 libros al año" (declaraciones de uno de los jefes de campaña de Meo en el programa "Medianoche" de TVN), intentando zanjar una cuestión política, tiendo a preocuparme; pobre familia, cuyo padre no juega con sus hijos, no tiene tiempo para vivir con su mujer y menos hacer familia. El tiempo no alcanza, la vida es corta, y la verdad solo debes dedicarte a leer. ¿Sistema de lectura velóz? ¿Conección a la matriz? ¿Osmosis intelectual táctil?. Por otro lado, si esto es cierto (lo que ya es cuestionable, en su forma) ¿Qué capacidad tiene el señor Meo para definir ciertos parámetros de desarrollo? Porque el leer mucho (y yo soy lector ávido desde los  4 años; actualmente tengo un promedio de lectura de un libro por semana, sea este de cualquier base; que decir de la cantidad de datos que suelo leer para hablar de cine, dibujar o trabajar, y pienso que eso es normal para gente que suele tener el hábito de la lectura arraigado) no implica un manejo y decodificación de la información per sé, sino más bien una falta de capacidad intelectual para seleccionar con criterio. Si alguien pone esto en duda, que haga el experimento. Veamos que pasa al momento en que deba desarrollar cualquier función que implique decidir.... Las cacidades intelectuales, y parte de ser presidente o gobernador, deben aplicarse al servicio. Y ello conlleva raciocinio, y rapidez al decidir.....si vas al baño, al menos apunta al pozo. Y en este aspecto, Meo....fuera del tiesto.